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CONDUCIRSE CON PRUDENCIA


El simple todo lo cree, pero el prudente mira bien sus pasos. 

Proverbios 14:15 LBLA 

En este mes de diciembre es impresionante lo que gastamos, casi sin darnos cuenta compramos hasta cosas, que al final son completamente innecesarias, es hasta estresante como todos los comercios, nos inundan con ofertas a mas no poder, con tal de convencernos de comprar, es más nuestro gobierno habla de “reactivación económica” y hasta aquí todo esta bien, porque si te lo has ganado bien, pues darte un gusto no esta mal, pero el problema radica cuando realmente no tenemos el dinero y comenzamos a usar las tarjetas de crédito, allí es cuando caemos en la trampa, es cuando el enemigo silenciosamente cobro una victima más, porque al final vas a tener que pagar esa deuda te guste o no, por eso es que debemos ser prudentes, debemos de aprender a valorar las compras que haremos, no comprar por impulso y si vas a caer en la tentación de entrar a una tienda solo para ver que hay de bueno, debes de tener en mente un presupuesto, por ejemplo nosotros, cuando vamos a conocer una nueva tienda con mis hijos, lo primero que les decimos es vamos a dar una vuelta completa y luego escogen una sola cosa, ya terminado el recorrido, les damos un presupuesto para que ellos gasten y escojan, pero si nosotros agarráramos la canasta y pusiéramos en ella, todo lo que se nos antoja comprar, saldríamos de esa tienda gastando de más, planifica antes de salir si vas a comer afuera o en tu casa, yo te diría que salgas por la mañana, no por la tarde o noche, mejor si quieres ir a comer fuera ve a desayunar, vas a gastar menos y vas a tener menos tráfico, menos personas, los que estén trabajando en las tiendas te van a atender mejor, pero si sales en la tarde o noche, vas a tener a toda la gente comprando, el montón de ofertas, vas a gastar más en comida, se te va a antojar algún postre o cafecito, no vas a tener limite de tiempo para hacer tus compras, este devocional no es para estar en contra de que compres, es para que seas prudente, no podemos esconder que este mes es crucial para nuestras finanzas, lo bien que inviertas será tu bendición o lo mal que gastes será tu maldición así de sencillo, hay personas que gastan este mes y pasan pagando el resto del año, por favor no caigas en la tentación, se prudente en tus gastos, recuerda Dios demanda de nosotros ser buenos administradores, en pocas palabras ser sabios y prudentes, a la hora de gastar nuestro dinero y por supuesto, no esta de mas decirte que si eres padre de familia debes apartar para los gastos de enero y si eres soltero, antes de comprar cosas para ti, compra un buen regalo para tus padres, eso quiere decir que debe ser útil, no precisamente caro, pero por favor no les compres cosas que usaran para la casa, cómprales cosas para ellos, como un par de zapatos, ropa, accesorios, un buen libro etc. Para concluir este devocional quisiera decirte que aunque esta época invita a gastar, a disfrutar con los amigos, a asistir a reuniones, pues no te olvides que hay alguien que siempre está esperándote y que si hoy tienes trabajo o tienes dinero para gastar en estas fechas, en parte es por tu capacidad, pero fue la gracia de Dios quien te puso en ese trabajo, así que no olvides porque es esta época, es cuando mas comprometidos debemos de estar, porque sin Él, toda esta emoción de la época seria inútil, como se lo dijo al pueblo de Israel en el desierto, “con casas llenas de toda clase de bienes que tú no acumulaste, con cisternas que no cavaste, y con viñas y olivares que no plantaste. Cuando comas de ellas y te sacies, cuídate de no olvidarte del Señor, que te sacó de Egipto, la tierra donde viviste en esclavitud” Deuteronomio 6:11-12 NVI, como lees hoy podemos aplicar esto a nuestras vidas, “cuando andes corriendo, comprando, cuando disfrutes de las reuniones, de la buena comida y gastes, no te olvides de Dios, pues el fue quien te proveyó”. Así que no hay nada de malo el estar disfrutando de esta época, pero hazlo con prudencia y por supuesto no te olvides de Dios. 


Reflexionemos, ¿ya tenemos nuestro presupuesto de gastos?, ¿Somos buenos administradores? ¿hay deuda que pagar? ¿Debemos apartar algo para enero?, que tu oración hoy sea, ser prudente en esta época.