'Y dijo Dios a Salomón: Por cuanto esto estaba en tu corazón, y no has pedido riquezas, ni bienes, ni gloria, ni la vida de los que te odian, ni aun has pedido larga vida, sino que has pedido para ti sabiduría y conocimiento para poder gobernar a mi pueblo sobre el cual te he hecho rey, sabiduría y conocimiento te han sido concedidos. Y te daré riquezas y bienes y gloria, tales como no las tuvieron ninguno de los reyes que fueron antes de ti, ni los que vendrán después de ti. ' 2 Crónicas 1:11-12 LBLA
Este es uno de los pasajes mas populares de la biblia, cuando el Señor se le apareció a Salomón y le dice pídeme lo que quieras, y Salomón le pide sabiduría, o por lo menos a eso vemos reducida esta historia, nos fijamos más en la gran oferta de Dios a Salomón lo que quieras, te aseguro que solo el 1% pediría lo que pidió Salomón, otros pedirían riqueza, fama, renombre, salud, vida, etc, es como sacarse la lotería, lo que uno quiera, ¿qué hay hoy en tu corazón, que hay hoy en el anhelo de tu vida?, sabes algo que me sucedió hoy, fue que al volver a leer este pasaje me di cuenta de algo que omitimos, Salomón pide sabiduría no porque quisiera ser el hombre más sabio del mundo, sino para gobernar el pueblo de Israel, Salomón pidió sabiduría para cumplir el propósito de Dios en su vida, sabes para serte muy franco y honesto, hoy cuando me pregunte ¿que hay en tu corazón, que hay hoy en el anhelo de tu vida?, mi respuesta definitivamente no estaba enfocada al propósito, sino a mis necesidades, esta enfocada a mis sueños y mis anhelos, si Dios se me apareciera le pediría un montón de cosas, pero reflexionando sobre este pasaje, me di cuenta que aunque Salomón tuviera sueños, anhelos o deseara alguna cosa, en su corazón había algo que dominaba y eso era cumplir el propósito de Dios en su vida, por eso pide sabiduría, hoy quien hace eso, hoy quien predica con ese ejemplo, si la moda es pedir para que Dios nos dé, en lugar de pedir conforme a su propósito, si te das cuenta parecía que Salomón había desperdiciado su oportunidad, pero de pronto Dios le dice te dará riquezas, bienes y gloria, como no la tuvieron los reyes antes de ti y no la tendrán los reyes después de ti, sabes siempre he sido bastante critico de pedirle a Dios y eso es porque creo que antes de pedir debemos tener alineado nuestro corazón a Él, Salomón si tenia alineado su corazón con Dios, por eso obtuvo todo lo que obtuvo, por eso es que no pidió lo que el mundo o la iglesia organizada pide hoy, sino lo que necesitaba para el propósito encomendado, ayer leía un post del hijo de un misionero en las montañas de Alta Verapaz y era un poema tanto para su papá como para Dios, él decía: “me has enseñado el camino que debo recorrer para cumplir el sueño de Dios para mi vida, me has demostrado que más vale arrancar una sonrisa del cielo, que el aplauso de las personas en la tierra, hoy tomo tu legado y continuo la labor sin anhelar nada más.” Definitivamente estas palabras dieron paso a este devocional, se que no todos tenemos un llamado misionero y que bueno sino que aburrido seria que todos fuésemos iguales, pero si debemos reflexionar sobre lo que pedimos y porque lo pedimos, si realmente se trata de hacer la voluntad de Dios o nuestra voluntad, necesidades claro que tenemos y muchas, siempre anhelamos una vida mejor, pero creo que no la obtenemos porque no anhelamos lo que hay en el corazón de Dios, siempre anhelamos realizarnos como personas, pero talvez debemos anhelar realizarnos como hijos de Dios, creo que la pregunta hoy es: Y si Dios se te presentara ¿Qué le pedirías?, tus gustos o las herramientas para cumplir su propósito en tu vida, tu respuesta arrancaría una sonrisa en su rostro o un aplauso de las personas en la tierra.
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