ENCONTRARTE

 

Pero Jesús le dijo: Nadie, que después de poner la mano en el arado mira atrás, es apto para el reino de Dios Lucas 9:62 LBLA

Una de las frases que más me ha impactado de un libro es: “has visto la libertad de un caballo, corriendo por las colinas”, talvez para ti no sea tan impactante pensar en un caballo, pero siempre he usado esta frase diciendo “te has sentido pleno en el recorrido de tu vida”, lamentablemente a todos los que les he compartido esta frase, siempre han respondido hace años no me he sentido así, para mi fue muy fuerte comprenderlo, es más creo que por eso esa frase que se desprende del libro Salvaje de Corazón de John Eldredge, fue muy impactante, he leído muchos libros, pero ninguno me impacto como este, porque en el momento que lo leí, me sentía bastante frustrado, me sentía de todas las maneras posible, pero demasiado lejos de describirme como pleno, tenía demasiadas cosas en la cabeza, pero al leer esta frase, me pregunte ¿qué me ata?, ¿qué es lo que me ha mantenido atado en todo este tiempo?, para que yo no pueda vivir plenamente, eran preguntas que temía hacer o que no quería hacerme, tuve que tomarme muchos créeme cuando te digo muchos días para encontrarme nuevamente con mi yo interior, habían demasiadas cosas, habían demasiadas capas que quitar para redescubrir mi yo interior, había cargado con mucha frustración, con muchos proyectos inconclusos o abandonados, había quebrado mas sueños de los que puedo recordar, había fracasado tantas veces, había hecho promesas que por más que trate no pude cumplir, había prácticamente puesto la mano en el arado y había visto hacia atrás y eso me hacia sentir pesar, me sentía como aquel elefante que estaba detenido por aquella pequeña cadena, le han enseñado desde pequeño que cada vez que jalara la cadena le iba a lastimar, pero ahora de grande solo con su fuerza podía destruir todo aquel lugar y volver a ser libre, pero a causa de aquel recuerdo no podía permitirse intentarlo, sabes el reencontrarnos con nuestro yo interior, hace que tengamos la fuerza de dejar todo atrás, de volver a creer que podemos ser plenos, en medio de una sociedad que hace todo lo posible por cortarte las alas, para que seas uno más del montón, pero afortunadamente dentro de nuestro ADN sabemos que Dios nos hizo para vivir plenamente, pero debemos de dejar todos esos lastres que tenemos, todos esos recuerdos, todo ese dolor y por supuesto todo ese fracaso que ha tendido sus hilos para detener nuestro potencial, por eso es que aunque suene muy fuerte Jesús tuvo razón al decir: Nadie, que después de poner la mano en el arado mira atrás, es apto para el reino de Dios, sabes el tener tantas ataduras hacen que pensemos que no hay futuro, que no podemos cambiar las situaciones, que nuestras vida siempre será igual y nos hace conformistas, pero en realidad Dios quiere que seamos libres, que no veamos atrás, sino hacia adelante donde Él esta preparado para bendecirnos, para darnos ese impulso que necesitamos para ser plenos de nuevo, para volver a valorar nuestra Fe, donde nos sentimos amados, donde nos sentimos realizados, donde es posible el fracaso, pero solo para levantarnos y volverlo a intentar, por eso es importante que te encuentres contigo mismo una vez más, aunque el dialogo sea doloroso, aunque ese dialogo sea confrontativo, es la única manera de sanar, es la única manera de liberarte, aceptar que el pasado no lo puedes cambiar, pero si que ese pasado no te detenga en el futuro, toma el tiempo que necesites, hazlo, porque entonces encontraras esa libertad que anhela tu alma, encontraras esa plenitud que tanto anhelas y no has podido experimentar.