El fiel amor del SEÑOR nunca termina; su compasión no tiene fin, cada mañana se renuevan. ¡Inmensa es su fidelidad!
Lamentaciones 3:22-23 PDT
Muchas veces solo nos levantamos y comenzamos con el estrés de llegar a tiempo a nuestras labores, al trabajo, al colegio, a la universidad, o para levantar a toda la familia y arreglarlos a todos, esto sucede a lo largo del año, pero muy pocas somos conscientes del gran regalo que Dios nos dio, un día más en el que podemos ver el amanecer, un día más en la que tuvimos la dicha de despertarnos y podernos levantar, algunas veces hasta de mal humor nos ponemos por tener que madrugar hacia el trabajo o los estudios, cuando deberíamos de ser agradecidos, porque tenemos un trabajo o un lugar en donde estudiar, recuerda que cuando perdemos la capacidad de asombrarnos por un nuevo día, nos volvemos insensibles a Dios, porque no podemos ver, ni escuchar el susurro de su amor, de su misericordia y de una nueva oportunidad para hacer bien las cosas, Dios tiene la extraordinaria capacidad de tener nuevas misericordias para nosotros todas las mañanas, todos los días, eso es extraordinario, porque muchas veces como humanos, nosotros nos levantamos aun enojados por algo que paso el día de ayer o hace unos meses, imagina si Dios fuera como nosotros, ya no tendríamos la oportunidad de ver un nuevo amanecer, por eso debemos de sonreír cada día, debemos de redituar adecuadamente el tiempo que se nos fue otorgado y aprovecharlo hasta su ultimo segundo, debemos de saber que Dios tuvo misericordia para darnos un amanecer más, un nuevo día, sé que no es fácil, pero debemos de agradecer y hacerlo adecuadamente, que tus primeras palabras del día, siempre sean de agradecimiento, sean de confianza, sean de esperanza, vas a tener tiempo de estresarte, pero que esos primeros momentos de tu día, sean para agradar a Dios, no olvides cuantas personas hubiesen deseado tener un nuevo día, pero no lo tuvieron, así que hoy no es un día más, no pienses de esta manera, como lo decía el rey Salomón, cada día tiene su afán, es un día diferente al de ayer, con miles de oportunidades de ser feliz y agradecido, con miles de nuevas aventuras, con miles de nuevos pensamientos, con miles de nuevas anécdotas, eres tú el que decide, como aprovechar este nuevo día, este nuevo amanecer, que no caigas jamás en la costumbre, que no caigas jamás en otro día más, sino en una nueva aventura de FE, porque Dios aun para este día tiene un propósito para ti, diseñado única y exclusivamente para ti, es mi deseo que puedas vivir un nuevo día lleno de plenitud, lleno de alegría y de propósito, no dejes que los afanes o las malas noticias, apaguen la plenitud de vida que nos otorgó Jesús en la cruz, no dejes que el estrés te robe la paz que sobrepasa todo entendimiento, pero sobre todo no dejes que la costumbre te robe el deseo de agradecer por un nuevo día, así que si aun no los has hecho, tomate unos minutos y agradécele a Dios por un nuevo día.