'Al ver esto, los discípulos se indignaron. —¿Para qué este desperdicio? —dijeron—. Podía haberse vendido este perfume por mucho dinero para darlo a los pobres. Consciente de ello, Jesús les dijo: —¿Por qué molestan a esta mujer? Ella ha hecho una obra hermosa conmigo. ' Mateo 26:8-10 NVI
Ayer tuve una muy buena conversación con un amigo donde hablamos sobre el valor que tiene el tener un punto de vista acertado, no sé si escuchaste hace unos años el debate si el vestido era dorado o azul, era una imagen que algunas personas decían que era azul y otras que lo veían dorado y conmociono las redes sociales, allí estábamos todos tratando de ver ambos colores, y pusieron a debatir a todo el planeta sobre quien tenia la razón, al final era azul, lo que sucedía es que desde el punto de vista y la iluminación, nuestro cerebro trataba de equilibrar el color para que pudiéramos percibirlo y sin saberlo a ciencia cierta el cerebro de algunos funcionaba de una manera interpretando los colores y el de otros funcionaba de otra manera para interpretarlo de otra forma, todo se trataba del punto de vista y el color, pues lo mismo pasa en esta situación en particular de la biblia, los discípulos si nadie más, que los discípulos veían un desperdicio, pero Jesús veía una obra hermosa, es interesante, pero ambos podrían haber tenido razón si lo vemos desde el punto de vista personal, pero si lo vemos desde el punto de vista espiritual obviamente le vamos a dar la razón a Jesús, era una obra hermosa, te aseguro que si tu te hubieras encontrado en el lugar de la mujer, hubieses hecho lo mismo, porque sabias que lo estabas haciendo para Jesús mismo, hasta algo de mas valor posiblemente hubieras derramado, pero desafortunadamente cuando se trata de ver a nuestro prójimo muchas veces actuamos como los discípulos, juzgamos desde el punto de vista personal y no desde el punto de vista espiritual y es allí donde fallamos, porque simplemente vemos la apariencia de la persona, la forma de vestir, la forma de hablar o expresarse, la manera en la que se peina y hasta la edad que tiene y por eso muchas veces los tachamos de rebeldes, de personas que no cambian, pero no nos damos el tiempo de verlos como una obra en proceso, que nosotros no debemos cambiarlos sino es Dios a través de la obra del Espíritu Santo, a veces criticamos a la persona sin saber el trasfondo de lo que ha vivido, o de lo que ha aprendido, muchas veces es fácil criticar, tal como lo hicieron los discípulos en su momento, pero es muy difícil ver el corazón de las personas, desafortunadamente porque no nos damos el tiempo de conocer a las personas, saber cual es su agenda diaria, sus pensamientos, sus motivaciones, es algo que Jesús si sabia por lo mismo valoro lo que estaba haciendo en ese momento la mujer, tú crees que Dios no se alegra de que las personas aun con toda su imperfección lo busquen, cada personas que juzgamos de manera apresurada, es nuestro hermano, por eso es que tenemos que pedirle a Dios que nos de su punto de vista antes de emitir alguna opinión sobre las demás personas, antes de criticar, sentarnos a escuchar la voz de Dios sobre como debemos de actuar y como debemos de amar a esa persona, al final el punto de vista de Dios es infinitamente mas valioso que nuestro punto de vista personal.
Por tal razón el segundo mandamiento es parecido al primero, sí sí conoces a Dios pero no amas a tu prójimo, entonces no conoces a Dios, simple...!
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